Fecha Publicación: 12-03-2020
En diversas ocasiones hablamos de la forma de interactuar, las expectativas o la manera de vivir que los millennials han empujado en nuestra sociedad. Sin embargo, considerando que es una generación que nacimos (me incluyo) entre 1981 y 1996, no habíamos enfrentado una situación de tanta confrontación como la que estamos viviendo ahora con la pandemia del COVID-19.
Está claro que vivimos tiempos distintos. Como muestra de ello, la canciller alemana Angela Merkel, en mensaje al país teutón, mencionó que este es el mayor reto que ha enfrentado Alemania desde la Segunda Guerra Mundial. La doctora Deborah Birx, Coordinadora de Acciones contra el Coronavirus de la Casa Blanca, mencionó que el gobierno enfrenta su propio 11-S y que invita sobre todo a los millennials a concientizarse y a resguardarse en sus casas.
Hablando sobre millennials, en una conversación entre amigos intercambiamos opiniones sobre las repercusiones que podrá traer este suceso al mundo, un hecho al que no nos habíamos enfrentado como sociedad y como raza humana desde la propagación mundial del sida en la década de 1980. Sin embargo, es momento de reflexionar cómo podrán cambiar las interacciones humanas a raíz de la pandemia, de replantearnos el papel del individuo frente a la colectividad, misma que al estar basada en la interacción y en la confianza, cede seguridad. ¿De hoy en adelante volveremos a ser igual de confiados?
Es momento de reflexionar cómo podrán cambiar las interacciones humanas a raíz de la pandemia.
Hoy nos vemos confrontados por un golpe de realidad en el que las tendencias que veíamos llegar a nuestras vidas, ahora aceleran y cobran una función primordial. Prueba de ello es el incremento en la demanda de servicios por parte de Netflix, que en 2018 llegó al 60% de la población de Estados Unidos. Por su parte, Amazon está experimentando incrementos no vistos ya que sus usuarios ven a esta plataforma como una manera de no exponerse al contagio del coronavirus. De hecho, la empresa de Seattle ya se encuentra en proceso de contratación de 100 000 nuevos colaboradores para sus centros de distribución y aumentará sus sueldos 2 dólares más por hora, de 15 a 17 dólares la hora. Además, son de las pocas empresas cuyas acciones se aprecian en estos tiempos de turbulencia. Estamos en un momento en el que se ha presionado el FF (fast forward) a la digitalización a la individualización del contenido y al pago del premium por requerirlo.
Será relevante vigilar de cerca cómo se desenvuelve la sociedad cuando logremos superar esta crisis. Ver cómo se recobran las aerolíneas, los destinos turísticos y los eventos deportivos. Aunque no es fácil, el distanciamiento social es necesario para que logremos controlar esta situación, siendo los latinos afines al contacto social y a tomar como “comportamiento rudo” el de aquellas personas que marcan un distanciamiento; ahora será primordial cambiar nuestra forma de pensar.
Yuval Noah Harari, autor de Sapiens, en su aportación a la revista TIME, compara la Ciudad de México o São Paulo como metrópolis mucho más afines a transportar un patógeno a velocidades no vistas, mucho más rápidas que las de la Florencia medieval o que la propia Ciudad de México cuando en marzo 1520 Francisco de Eguía contagió de viruela a la población de la región y en un periodo de 9 meses, se dice, terminó con las vidas de una tercera parte de sus habitantes. Por esto, necesitamos apelar a un liderazgo social que tome el tema y muestre su poder de movilización. Para los millennials, este es un llamado que tenemos que atender.