Fecha Publicación: 05-12-2022
Los plásticos han tenido un papel fundamental en el impulso de la economía moderna. Dada su alta versatilidad, desempeño y bajo costo ofrecen aplicaciones para prácticamente todas las industrias. Sin embargo, el crecimiento exponencial en la producción de plástico y la ausencia de medidas efectivas para el manejo de sus residuos han provocado impactos significativos en los ecosistemas marinos.
De acuerdo con cifras de la ONU, de 1950 a la fecha se han producido más de 9 mil millones de toneladas de plástico y generado 7 mil millones de toneladas de residuos. Tan sólo en las últimas dos décadas, se generaron 350 millones de toneladas de residuos plásticos. Dos terceras partes de los plásticos tienen un periodo de vida menor a 5 años.
Separar los residuos ayuda a palear nuestro sentimiento de culpa por la expectativa de que estos serán reciclados. Sin embargo, sólo 9% de los residuos plásticos se reciclan a nivel global. Del resto, 19% se incinera, 50% se deposita en rellenos sanitarios y 22% termina en tiraderos irregulares o se filtra a los ecosistemas. En México generamos 6 millones de toneladas al año de residuos plásticos y reciclamos menos el 9%.
A la fecha, hemos acumulado más de 30 millones de toneladas de plásticos en los océanos. Al interactuar con ecosistemas marinos, los plásticos se descomponen en micropartículas que impactan la cadena alimenticia. La contaminación de plásticos ya es perceptible en todos los grupos de especies marinas. De no revertirse la tendencia de contaminación, en 2040 podría haber más plástico en los océanos que peces.
Si bien, los gobiernos han introducido medidas para reducir los residuos plásticos, los avances son incipientes. La OCDE señala que 120 países han prohibido o aplicado impuestos a los plásticos de un solo uso. Sin embargo, la mayoría de las regulaciones se limitan a fuentes, como bolsas, que representan una porción mínima del total de residuos. México no cuenta con leyes federales específicas para la contaminación de plásticos.
Los impactos crecientes de desechos plásticos preocupan a la comunidad internacional. El viernes pasado concluyó, en Uruguay, la primera ronda de negociaciones para concretar un “Acuerdo Internacional Vinculante que detenga la Contaminación de Plásticos”. El acuerdo, que integrará a 160 países de la ONU, deberá adoptarse a finales de 2024. En la reunión de Uruguay se manifestaron las diferencias entre países a favor de normas obligatorias y de alcance internacional con países que prefieren compromisos voluntarios establecidos a nivel nacional.
En su intervención, México anunció su adhesión a la Coalición de Alta Ambición de Plásticos, integrada por 45 países que promueven restringir el consumo de plástico a niveles sostenibles y facilitar su economía circular. Dada nuestra riqueza de biodiversidad marina, nos conviene apoyar un acuerdo con normas obligatorias y de alcance internacional.
POR ENRIQUE LENDO ES ASOCIADO DE COMEXI, EXPERTO EN TEMAS ECONÓMICOS Y DE DESARROLLO SUSTENTABLE
@ENRIQUELENDO
Participación en El Heraldo
