Fecha Publicación: 09-07-2025
En agosto de 1971, Richard Nixon desconectó el dólar del oro. Lo llamó una suspensión “temporal”, pero fue el punto de no retorno: el dólar dejó de ser convertible, y el mundo entró en una nueva era donde el dinero flotaba… pero el poder seguía en tierra firme, anclado en Washington.
Durante más de medio siglo, el dólar no solo fue moneda de cambio, sino símbolo de orden. Respaldado por tratados, deuda, portaaviones y sanciones, fue el corazón del sistema financiero global. Hasta ahora.
Sigue leyendo aquí