Fecha Publicación: 28-05-2025
20 meses después de la incursión del grupo terrorista Hamás a suelo israelí que se saldó con 1,200 muertos y 300 rehenes, la represalia que vino después está convirtiendo el estrecho territorio de Gaza en un cementerio a cielo abierto. No queda casi ningún edificio en pie y los indiscriminados bombardeos se enfocan a aniquilar gente y arrasar lo arrasado.
Israel dice atacar objetivos terroristas pero su ofensiva va dirigida contra campamentos de refugiados y hospitales en los que viven hacinados y hambrientos niños, mujeres y ancianos indefensos. Las grandes potencias han sido incapaces de parar la locura militar de Benjamín Netanyahu y sus aliados ultras que han ignorado todas y cada una de las resoluciones dictadas por organismos multilaterales.
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