Fecha Publicación: 25-02-2025
Normalmente, y con razón, se piensa de los canadienses como corteses, relajados y tolerantes. O como dicen algunos, "gringos con buenos modales".
Pero es hasta que "les llenan el hígado de piedritas", como ha hecho el presidente Donald Trump con su pretensión de "hacer de Canadá el estado 51" de la Unión Americana. La reacción ha sido una expresión de nacionalismo rara vez vista en Canadá y por ende tanto más sorprendente. De hecho, no se recuerda nada parecido en los últimos 30 años, desde parodias del Himno del Cuerpo de Marines y cantos masivos del himno nacional, "Oh, Canadá", hasta suficientes cancelaciones de viajes que llevan a algunas líneas aéreas a hablar de reducir sus vuelos hacia Estados Unidos. Y eso en un país y una temporada cuando los vacacionistas buscan regiones soleadas, como Florida o Arizona.
Sigue leyendo aquí