Fecha Publicación: 30-01-2025
El ADN nativo e iliberal de Donald Trump ya lo conocemos, así como su papel hostil hacia los inmigrantes y los ataques de la democracia desde dentro. Sin embargo, su pulso autoritario toma otra dimensión debido a los cimientos de su presidencia firme, recargada y todopoderosa: acechar límites para tantear nuevas fronteras y enfrascarse en un trío maquiavélico de poder geopolítico con Vladimir Putin y Xi Jinping que lo ponen en desventaja.
Sigue leyendo aquí