Fecha Publicación: 28-01-2025
El breve pleito entre Colombia y Estados Unidos acerca de las condiciones en que viajaban los colombianos indocumentados deportados en aviones militares estadounidenses duró apenas unas horas, y el gobierno de Gustavo Petro debió ceder ante la presión combinada de medidas comerciales y de limitación de visados.
En el lenguaje militar estadounidense, bien podría decirse que fue "un disparo frente a la proa" (a shot across the bow) para los más rebeldes socios comerciales de Estados Unidos, y de creer a The Wall Street Journal, especialmente Canadá y México.
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