Fecha Publicación: 11-12-2024
Tras 53 años de dominar Siria, por las buenas y por las malas, el régimen de la familia Assad finalmente fue derrocado. La explicación es simple. El gobierno del presidente, Bashar Al-Assad, se derrumbó de forma espectacular el fin de semana, ante la relampagueante ofensiva de varios grupos armados de oposición que en cuestión de días capturaron las principales ciudades sirias y entraron en Damasco. Hasta ahí, podría decirse, todo bien.
Pero ahora comienza lo difícil: balancear tensiones entre los grupos milicianos, que van de kurdos aliados con Estados Unidos a los vinculados con Arabia Saudita o los que tienen raíces en el yihadismo y el Estado Islámico.
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