Publication Date: 04-11-2024
A unos días de las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos, las redes sociales se han convertido en un terreno fértil para la manipulación de la opinión pública. Las deepfakes, videos y audios creados con inteligencia artificial para falsificar la realidad, han desempeñado un papel central en las campañas de desinformación, permitiendo a actores extranjeros como Rusia, Irán y China alterar la percepción de los votantes sobre los candidatos. Pero esta tendencia no es exclusiva de Estados Unidos, y países como México deben estar atentos a cómo estas tecnologías podrían afectar sus propios procesos electorales.
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