Fecha Publicación: 17-10-2024
El “segundo piso” de la cuarta transformación ha sido lema de campaña y de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Pero ¿qué se imagina la gente cuando escucha eso? Para los chilangos, la referencia obligada es el Anillo Periférico, vialidad que rodea una parte importante de la Ciudad de México cuyo segundo piso, por cierto, se construyó cuando la hoy titular del Ejecutivo era secretaria del gobierno local a inicios de siglo.
El juego de palabras es, en este sentido, muy lineal: Segundo Piso-Periférico-Sheinbaum. Pero la analogía tiene sus trampas. Ni el segundo piso es hoy lo que fue hace 20 años (ahora con unas zonas gratuitas y otras de cuota), ni tampoco se entendería muy bien cómo se enmarca dentro de la filosofía morenista. Cuando se construyó el primer tramo y los subsecuentes el argumento era descongestionar las vialidades, ampliar el flujo de vehículos y dar más ancho de banda a la movilidad (privada, eso sí).
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