Fecha Publicación: 24-04-2024
En un entorno donde la modernidad parece abrazar todos los aspectos de la vida cotidiana, resulta paradójico que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) dirigido por el Contralmirante José Ramón Riviera Parga es uno de los principales puntos de conexión aérea de América Latina, navegue a través de turbulencias administrativas y de infraestructura que limitan su potencial. Las malas decisiones han apuntado en caídas de viajeros nacionales y reducción de ingresos.
La reciente decisión de la Secretaría de Marina (Semar) de invertir en la renovación de la Terminal 1 es un paso en la dirección correcta, aunque plantea interrogantes sobre la temporalidad y continuidad de tales esfuerzos bajo futuras administraciones, así como la deuda que persiste y se paga con el TUA por la elimininación del Aeropuerto de Texcoco, tema que continuará por años.
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