Publication Date: 27-03-2023
La legitimidad es un concepto en disputa permanente dentro de todas las sociedades y que no puede monopolizarse. El caso francés, en donde se están viviendo las movilizaciones más intensas de los últimos años, ha puesto a prueba cómo la legitimidad de un presidente y su gobierno —aun cuando fueron elegidos democráticamente— puede no ser suficiente para impulsar unilateralmente cambios que afectarán drásticamente a su sociedad.
En las últimas semanas Francia ha sido sacudida por múltiples y vigorosas protestas contra la reforma al sistema de pensiones impulsada por el presidente Emmanuel Macron. El gobierno busca simplificar el sistema de pensiones (que actualmente tiene 42 regímenes diferentes) y aumentar la edad de jubilación de 62 a 64 años. Éste ha sido un tema permanente de tensión en las últimas décadas, pues desde que el presidente François Mitterrand redujó la edad de jubilación de 65 a 60 años en 1982, todos los presidentes subsecuentes han impulsado (o tratado de hacer) cambios para revertir esta medida, siempre encontrando fuertes resistencias en forma de protestas y manifestaciones.
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