Fecha Publicación: 04-11-2022
Asistimos a un momento particularmente delicado de la relación entre México y Estados Unidos. Parecería que los canales y mecanismos oficiales de diálogo y negociación necesitan ser reforzados con herramientas de psicología social para comprender por qué y para qué los actores de cada lado plantean las cosas.
El siguiente intercambio (que, parafraseando a los clásicos, no es falso, pero tampoco es verdadero) recoge reclamos mutuos y apenas deja asomar vías de entendimiento.
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