Fecha Publicación: 27-05-2022
Con cero margen estaba el gobierno de López Portillo en aquel inolvidable 1982. No se trató de un mero problema de flujo lo que provocó que no pudiéramos cumplir con puntualidad el servicio de nuestra deuda, como en un principio se planteó. Problemas estructurales muy profundos impedían que la economía creciera lo suficiente como para servir su deuda y, sobre todo, a los mexicanos.
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